En Bohigas es tiempo de vendimia

01/10/2018

A estas alturas, ya se ha hecho la vendimia de todas las variedades blancas (macabeo, xarel·lo, parellada y garnacha blanca) y tan sólo queda por cosechar la garnacha negra y el sumoll.

Este año, en que las lluvias han sido abundantes e intensas, especialmente, durante los meses de mayo y junio, la evolución de la uva ha sido lenta y complicada: la humedad ha hecho perder –en su primera fase de evolución– parte de una cosecha que se preveía abundante, aunque la producción que se ha salvado ha quedado bien equilibrada en su conjunto. 

Las variedades por el cava, que se cosechan un poco antes, han obtenido una buena acidez, con una cantidad de azúcares ligeramente por debajo respecto a años anteriores. En cuanto a la cosecha de las variedades para el vino, debido a las lluvias de septiembre, esta se ha tenido que avanzar, para evitar problemas sanitarios con la viña –hongos provocados por la humedad–. Como resultado, quedarán unos vinos con un contenido alcohólico un poco por debajo del obtenido en 2017. 

A estas alturas, ya se ha hecho la vendimia de todas las variedades blancas (macabeo, xarel·lo, parellada y garnacha blanca) y tan sólo queda por cosechar la garnacha negra y el sumoll.